Basilica y claustro de Santa Maria di Castello
La monumental basílica (origen anterior al siglo VII) constituye, con el anexo convento y el museo, un complejo de extraordinaria importancia histórica, arquitectónica y artística. Construida dónde se encontraba el antiguo asentamiento urbano de la ciudad, la iglesia pasó a manos de los Dominicos en 1442, convirtiéndose en un centro de escritores y humanistas.
En el claustro se conserva la obra maestra de Giusto da Ravensburg L’Annunciazione, pintada en 1451; en el museo se encuentran otras preciadas obras, entre las cuales telas de Ludovico di Brea, e iconos rusos de los siglos VI y VII.